Mi primera vez en Islandia, que no nuestra, en busca de Auroras Boreales, naturaleza superlativa y una iglesia negra. Un viaje desde la peninsula de Snaefellsnes hasta el pueblo pesquero Höfn y vuelta. Más de 1.000 kilometros de patrimonio de natural y de la humanidad bajo la nieve.
Visitar Islandia en invierno tiene sus consecuencias, es la epoca ideal para ver auroras siempre que el cielo esté despejado y aparezcan, pero tambien te puedes encontrar, como en nuestro caso, con alertas por temporales, nevadas interminables y cascadas congeladas.
Puntos clave del artículo
Peninsula de Snaefellsnes
Es una de las zonas más completas de Islandia. Aquí encontrarás todo, acantilados, playas, animales, campos de lava, volcanes, glaciares, cascadas, pueblitos e iglesias en medio de la nada. Por ello se a ganado el título de ser una Islandia en miniatura dentro de Islandia.
Acantilados Gerduberg
Cuando el gps nos manda girar tierra adentro con destino a los acantilados de Gerduberg nos quedamos un poco extrañados. La constumbre de vincular un acantilado a la costa nos hizo pecar de ignorantes. Gerduberg es un acantilado, escarpa vertical en un terreno, de 1 km de largo formado por columnas de Basalto de 7 a 14 metros de altura. Nos dejó igual de fríos que el tiempo que hacía.
Playa Ytri Tunga
La playa de Ytri Tunga es perfecta para ver focas en plena libertad. Durante la primavera y el verano es más sencillo verlas que el resto del año pero tras caminar un poco y manteniendo siempre la distancia de seguridad (mínimo 50 metros) pudimos verlas.
Hellnar
Un antiguo pueblo de pescadores rodeado con un encanto irresistible, entre los acantilados y formaciones basálticas de Arnastapi y Lóndrangar. La zona esta perfectamente preparada para caminar con senderos y miradores para disfrutar del espectacular paisaje. El tiempo no ayudaba a pasear por ellos.
Los acantilados Lóndrangar son un par de agujas de roca escarpadas a la orilla del mar. De 75 m. y 61 m. respectivamente, son un espectáculo singular.
Parque Nacional de Snaefellsjökull y un famoso volcán
Estamos en uno de los Parques Nacionales de Islandia, el Parque Nacional Snaefellsjökull. Uno de los volcanes más famosos, el volcán Snaefellsnes, inspiró a Julio Verne en su novela Viaje al centro de la tierra sin ni siquiera haberlo pisado. Con la frase «Desciende al cráter del Yocul de Snefells que la sombra del Scartaris acaricia antes de las calendas de julio, audaz viajero, y llegarás al centro de la Tierra, como he llegado yo» comienza la aventura.
Volcán Saxhóll.
Saxhóll es un pequeño vocán de aproximadamente 100 metros de altura con unos escalones metalicos que hacen muy sencillla su ascención. ¡Perfecto para las torpes como yo! Desde el mirador podemos observar el crater, los immensos campos de lava que lo rodean, el oceano Atlantico y el volcán que da nombre al parque, el Snaefelessjokul.
Sigue nuestra ruta a la cascada en Wikiloc.
Hellissandur
Este tipo de casitas tipicas las vamos a encontrar en pequeñas dosis y normalmente estan en propiedades privadas. Por lo que el acceso estará restringido, respétalo.
Kirkjufell
Aunque en Islandia todo es punto top de turismo, este es un lugar que «gracias» a Juego de tronos se ha convertido el visita obligada para todo el mundo, tanto que el parking, antes gratuito, ahora de pago, y las vistas estan a tan solo 50 metros.
El lugar tiene magia, la montaña Kirkjufell, con su forma cónica, al fondo y a sus pies la pequeña cascada Kirkjufellfoss crean una composición espectacular. Nevado es precioso, con un atardecer o una aurora ya sería la leche. queda pendiente.
Stykkishólmur y el faro de Sugandisey
Stykkishólmur es una villa pesquera en el norte de la peninsula de Snæfellsnes. Sus casas antiguas y coloridas parecen haberlo detenido en el tiempo.
En el puerto hay una isla de basalto, Súgandisey, conectada a tierra por una carretera y coronada con un pequeño faro desde el que se ve todo Stykkishólmur a un lado y el mar con pequeñas islas al otro. Desde aquí salen los ferries para visitar los fiordos del oeste y ahorrar muchos kilometros de carretera.
Peninsula de Reykjanes
La peninsula de Reykjanes es la primera que pisarás al llegar a Islandia, ya que en ella esta el Aeropuerto de Keflavic. Es una zona volcánica donde podrás ver desde acantilados, faros al nivel del mar, secaderos de pescado hasta areas geotermales como la de Seltún o el lago más grande del sur de islandia, Kleifarvatn.
Miðlína, el puente entre continentes
Este puente, costruido en 2002 en honor al explorador Leif Eriksson considerado uno de los primeros europeos que llegó a America del Norte, marca el limite entre las placas tectónicas Eurasiática y Norteamericana. A ver, entre nosotros, es más divertido volverte niño y echar unas risas con «ahora toy aquí y ahora allí» bajar al lecho y hacerte la típica foto separando placas. Lo chulo de pasear entre placas está en Þingvellir, así que…. toca seguir leyendo 😉
Garðskagi, o el faro de Garður
En la punta suroeste de la peninsula de Reykjanes nos encontramos con el faro Garðskagi, construido en 1897 y hasta hace poco centro para el estudio de aves migratorias procedentes de Groenlandia y America del Norte. Muy kuki, txikitin, hay un barco cerca del nuevo faro muy bonito. El conjunto merece mucho la pena.
Secaderos de pescado en Hafnarfjörður
No hay palabras para describir lo que vimos, enormes construcciones de madera con miles de pescados de diferentes tipos y tamaños secándose al sol, en teoría.
Pero lo más impactante es el olor, las pintas de los bichos colgados, el olor, sanidad no ha pasado por aquí, ese olor… mejor no sigo.
Nos pillaba de camino a zona geotermal del lago Kleifarvatn por la carretera 42 pero, la nieve impedia el paso y nos fue imposible llegar. Habrá que volver.
Círculo Dorado
La zona del Círculo Dorado es zona de muchos lagos, ríos de agua caliente y volcanes a un paso de la capital, por lo que es de las zonas más visitadas.
Alberga uno de los lugares con más historia e importantes para los islandeses, el Parque Natural de Þingvellir.
Þingvellir o Thingvellir
Þingvellir significa literalmente “Llanuras de la Asamblea”. La creciente población de Islandia necesitaba un lugar donde dirimir las disputas y acordar leyes y tras crear pequeñas asambleas en diferentes puntos del país, decidieron crear una asamblea general. En el año 930 la población se reunió en Blaáskógar, hoy conocido como Thingvellir, para participar en el primer Alping islandés, marcando así el comienzo de la nación de Islandia.
Aparte de ser un Santuario Natural Protegido en Islandia, esta catalogado como Patrimonio de Humanidad por la UNESCO desde 2004.
Lögberg o la piedra de la ley
El parlamento Islandes duró desde 930 a 1262, año en que se aliaron al rey de Noruega bajo el pacto llamado «Gamli sáttmáli».
Es el parlamento democratico más antiguo documentado del que se tiene conocimiento hasta la fecha. Y en este mismo lugar en 1944 se firmo la independencia de Islandia.
La unicación exacta de Lögberg es un misterio hoy en día, aunque se barajan dos ubicaciónes posibles, Podría ser la parte alta y llana donde ahora se encuentra la bandera islandesa o podria haber estado en la falla, Almannagjá, al resguardo de la pared rocosa.
Iglesia Þingvallakirkja y cristianismo en Islandia
Antes del año 1000, se hicieron varios intentos de difundir el cristianismo en Islandia con resultados variables, pero las prácticas paganas aún se mantuvieron. El parlamento estaba dividido entre paganos y cristianos por lo que, después de un gran debate en el Alping se decidió adoptar el cristianismo aunque los paganos podían continuar con sus creencias en secreto.
La primera iglesia se construyó en Þingvellir poco después de la adopción del cristianismo. Se dice que fue hecho con madera donada por el rey noruego, quien también donó una campana que se usaba para las sesiones parlamentarias.
La iglesia actual en Þingvellir fue consagrada en 1859 y en 1907 se reconstruyó y modificó la aguja. En el chapitel hay tres campanas, una de ellas antigua, otra donada por el obispo Jón Vídalín cuando fue ordenado sacerdote en 1698, y una tercera que se hizo para «repicar» la independencia en 1944.
Granja Þingvallabær
Reconstruida en 1039 Primero se uso como la oficina del supervisor del parque y hoy en día se usa como residencia de verano del primer ministro y altos cargos. En conjunto, el lugar es precioso aunque por fuera parezca una caballeriza o
Lago de Thingvallavatn
Las placas tectónicas de Eurasia y América del Norte atraviesan toda Islandia. El el sur se superponen pero en Thingvellir se rompen y la tierra entre si se hunde, haciendo así que el río Oxaca inunde la zona creando el lago Thingvallavatn.
A pesar de la fría temperatura del agua, el lago es rico en vegetación. En sus aguas se puede bucear y pescar bajo licencia.
Bucear en Silfra
La grieta de Silfra es uno de los mejores lugares para bucear por sus aguas cristalinas, frías y su magnifico entorno. ¿Quién no quiere sumergirse entre dos continentes? pero igual mejor en verano.
Diferentes operadoras ofrecen el servicios de buceo y/o snorkel aunque es mejor que lo reserves con tiempo ya que es una actividad muy demandada.
Geysir
Dejamos atras el bello Thingvellir para ir en busca de la madre de todos los géiseres del mundo, Geysir. Por esta fuente hidrotermal reciben su nombre el resto de géiseres del mundo.
Se encuentra en el valle Haukadalur, una de las zonas geotermales más activas de Islandia y probablemente la más famosa del mundo. Y para nuestra sorpresa está junto a la carretera y el olor a huevo podrido lo inunda todo.
Lamentablemente un terremoto colapso la grieta y hoy Geysir está inactivo. Pero a escasos metros de el se encuentra el géiser Strokkur, no tan espectacular pero con grandes erupciones de agua caliente sulfurosa.
La cascada Gullfoss
Ver esta cascada que está muy cerquita de Geysir nos llevó dos excursiones. El primer día la niebla lo cubría todo y era peligroso adentrarse incluso en el parking ya que la visibilidad era nula. Pero a la segunda, lo conseguimos.
Lo que hace diferente a la casada Gullfoss es que la vemos desde arriba, se forma por la separación de las placas tectónicas y la continua erosión del río Hvítá le va dando forma.
Lo que tiene ir a Islandia en invierno es que la nieve lo cubre todo y no se aprecia bien lo espectacular que es y que varios accesos pueden estar cerrados. Desde los diferentes miradores, cada vez más vallados, ejem, por negligencias varias de turistas… se puede admirar la cascada al completo.
Kerid
¿Quién quiere ver un volcán desde arriba? Pues este es muy facil de ver.
El crater Kerid está junto a la carretera, tiene un pequeño parking y al estar en una parcela de propiedad privada, la visita es de pago. Pero si vas pronto y aún no han abierto…
Es una de las calderas volcanicas más jovenes de Islandia, con tan solo, 3000 años. Dicen que el color esmeralda del musgo contrasta con la negrura de la tierra volcánica y el azul turquesa de sus aguas pero, para muestra un botón. También se rumorea que un camino te lleva a orillas del lago y puedes dar la vuelta.
En esta ocasión el blanco reina y soplaba tal viento que casi no nos podiamos mantener de pie.
Costa Sur
Carreteras rectas infinitas, a un lado campos de lava interminables y al otro colas de glaciares y cascadas por doquier. Esto es lo que nos espera en la costa sur de islandia, salpicada de pueblitos hasta llegar a Hofn.
Cascada Seljalandsfoss
La cascada Seljalandsfoss esta a un paso de la carretera y el acceso el totalmente llano. Cuando la nieve no lo impide es posible pasar por detrás siguiendo un sendero marcado y subir a un mirador para ver el punto donde el agua se lanza al vacío.
Gljúfrabui
Esta pequeña cascada «escondida» se encuentra a apenas 300m de Seljalandsfoss. Para entrar en ella tendrás que atravesar la grieta en la roca, pisar rio y mojarte, pero merece muchísimo la pena. Si me tengo que quedar con una sola cascada (de las que vimos) de Islandia, sin duda alguna, Gljúgrabui es la elegida.
Cascadad Skógafoss
Podríamos decir que es la cascada más visitadas de Islandia, por estar a dos pasos de la carretera Ring Road, por tener un acesso cómodo, y zonas de descanso justo en la entrada. Cuando la nieve no cubre el suelo, puedes ver un gran lecho de piedra volcánica y subir los 400 escalones para ver unas panoramica espectacular de la costa sur.
Vik i Myrdal
Vik i Myrdal es un contraste entre su poblado, con una belleza especial y una naturaleza superlativa. Rodeado de negras playas, altas montañas, glaciares y volcanes, Vik es mucho más que un pueblo costero sin puerto pesquero.
Esta pequeña localidad ha sido escenario de diferentes peliculas y series de televisión, os recomentdamos ver Katla, tanto si vas a ir como si no, es un poco rarita pero engancha, y después allí te vas fijando y te emocionas con cosas y sitios que para los demás no significan mucho.
Dyrhólaey
Este acantilado es el punto más al sur de toda la isla y su nombre significa «La Puerta de la Isla de la Colina», porque en realidad Dyrhólaey era un isla que a través de sus marismas a terminado por unirse a Islandia.
Es un lugar espectacular, vale, me repito como el ajo pero es que Islandia es espectacular a lo bestia.
A un lado de este acantilado tenemos una playa de arena negra infinita presidida el faro Dyrhólaey, hoy automático.
En primavera, este lugar se convierte en uno de los mejores “monasterios” para observar Frailecillos o Puffins.
Al otro lado tenemos primero un saliente de roca de 120 metros de longitud y con dos arcos, tras el la playa, también negra de Reynisfjöru con su famosa formación de rocas .
Playa Reynisfjara
Lo que hace a esta playa especial, ya que en Islandia lo normal es que las playas sean de arena negra gracias al sedimento volcánico, es su entorno.
- Sus columnas de Basalto de 66 metros de altura llamadas Hálsanef.
- El conjunto de rocas Reynisdrangur. Cuenta la leyenda que se trata de tres troles llamados Skessudrangar, Landdrangar y Langhamrar, que, en su intento de atraer barcos a la orilla, una mañana se despistaron y fueron sorprendidos por el sol quedando convertidos en piedra.
- Las enormes y peligrosas olas que rompen y pillan a turistas despistados.
- La cantidad de guijarros de basalto que forman su arena.
Es por esto que en 1991 fue clasificada como una de las 10 playas no tropicales más bonitas del mundo.
Iglesia Víkurkirkja
Situada en lo alto de una colina es el monumento por excelencia de Vik. Además, es el punto de evacuación para la población en caso de que el volcan Katla entre en erupción. Si esto ocurre, el glaciar Mýrdalsjökull que actualmente cubre el volcán, se derretirá y lo inundará todo.
La iglesia es Blanca con tejado rojo, típica construcción islandesa, bonita y sobria, preside Vik desde 1934 y ofrece unas vistas de la localidad y la playa espectaculares.
Parque Nacional Skaftafell
Fundado en 1965 hoy cuenta con casi 5000 km2 de superficie y es el segundo parque nacional de Islandia. Aqui nos encontramos la cascada Svartifoss, famosa por sus columnas de Basalto y los glaciares Skaftafellsjökull y Svínafellsjökull.
Cascada Svartifoss
Esta en pleno corazon del Parque Nacional Skaftafell y su nombre significa cascada negra. Rodeada de columnas hexagonales de basalto, que es básicamente lava solidificada, es una visita imprescindible.
Salimos del centro de visitantes del Parque Nacional de Skaftafell y comenzamos a subir, es una ruta facil con un par de subidas que, a los de club del vago, nos puede costar algo más, y con nieve se complica. Una de las mejores adquisiciones para ir a Islandia entra aquí en acción, los crampones metálicos. (los de pinchos, no esos baratos de gomitas que van contaminando el suelo al desprenderse).
Una vez superada la primera cuesta, las vistas de la llanada de lava son infinitas, las dejamos atrás para pasar por unas cascadas pequeñitas, un puente de madera y por fin, al fondo aparece pequeñita Svartifoss.
Pero una vez a sus pies, aún congelada, es imponente.
Sigue nuestra ruta a la cascada en Wikiloc
Glaciar Svínafellsjökull
Las horas de luz en Islandia en invierno son limitadas y por temor a que se nos hiciese de noche optamos por ir a este glaciar ya que se nos antojaba más accesible que el Skaftafellsjökull.
Hace años era posible acceder hasta la lengua del glaciar, pero actualmente el acceso está cortado. Junto a la carretera 1 se ha habilitado un pequeño parking desde donde parte la pista que lleva sin pérdida hasta el glaciar Svinafeljokull.
A simple vista parece que en 15 min vas a llegar… Según el gps fueron 2 horas, eternas. Lo ves ahí cerca pero es inalcanzable.
Tras salirnos de la pista (por favor no lo hagáis), hundirnos en la nieve hasta la cintura y acabar exhaustos, llegamos a la laguna del glaciar.
Es una de las excursiones que valoras con el paso del tiempo, en ese momento el «Has llegado» que me decian en mi cabeza solo sonaba «Sácame de aquí»
Sigue nuestra ruta kamikaze al glaciar en Wikiloc.
Jökulsárlón o la laguna del río glaciar
Jökulsárlón es el lago más profundo de Islandia, de unos 248m y tiene a superficie de 18 km². Se formó cuando el glaciar Breiðamerkurjökull comenzó a retroceder.
Esta llena de icebergs con más de 1000 años de antigüedad y entre ellos puedes ver focas descansando o buscando peces durante todo el año.
La laguna conecta con el oceano y sus icebergs varan en la playa negra asemejando diamantes a la luz del sol.
Playa de Diamantes
Recibe su nombre por los grandes y pequeños trozos de hielo provenientes de la laguna Jökulsárlón.
Es uno de los lugares de Islandia donde se apelmazan más fotografos por metro cuadrado que en ningun otro lugar, sobre todo al atardecer. Y como no, allí estabamos nosotros.
Como en todas las playas de Islandia, hay que tener cuidado con las olas, en un descuido puedes acabar probando sus gelidas aguas.
Höfn
Seguimos nuestra ruta por la carretera 1 para recalar en este pueblo. Los miradores y el puerto son los puntos imprescindibles a visitar. Si el mar esta en calma crea un espejo ideal para fotografiar. Cuando lo visitamos, estaba repleto de camiones y parte cerrada al acceso por un rodaje, así que nos tuvimos que conformar con el puerto.
Stokksnes
Pasado Höfn, seguimos un desvio en dirección a una de las playas más mágicas de Islandia. Por el camino encontramos caballos y renos. y como no, había que parar a fotografiarlos.
Al llegar nos encontramos el Viking Café, donde, aparte de tomar un chocolate y una buena tarta, hay que pagar la entrada a Stokknes, ya que el acceso a la playa es de propiedad privada.
Lo primero que visitamos, a pie, es un poblado Vikingo que en realidad es un set. Se construyo en 2010 para un rodaje que luego nunca llego a realizarse, allí la dejaron para deleite de los turistas.
Nos recomendaron ir hasta el faro recorriendo las dunas pero, teniamos tantas ganas de esta localización que dejamos el coche a las puertas de un recinto cerrado, que después supimos que es un radar de la OTAN y una antigua base militar británica durante la II Guerra Mundial, y nos dirijimos a la playa.
Será por las altas montañas Vestrahorn que la flanquean a un lado, o su color azabache o las dunas y la vegetacion al otro lado, pero Stokknes tiene algo que te cautiva.
Habíamos visto fotos y creiamos saber que nos esperaba pero allí te das cuenta de lo pequeñito que eres.
Reikiavik
Lo mejor que puedes hacer en la capital de Islandia es darle a la zapatilla y recorres sus calles, donde encontraras diversas esculturas, como el viajero del sol en el paseo marítimo, galerías, coloridos edificios y comercios muy pintorescos.
Dejate llevar por la ciudad.
Perlan
En la colina Öskjuhlíð, nos encontramos con un antiguo deposito de agua convertido en museo. Aquí, aparte de tener una panoramica completa de la capital desde su mirador de 360º puedes ver todas las maravillas de la isla de fuego y hielo, sin moverte.
Tiene diferentes exposiciones sobre las maravillas de Islandia, algunas interactivas, ideal si vas con niños.
En la planta del mirador nos encontramos diferentes tiendas, restaurantes y … una heladería, a la que no nos pudimos resistir aun estando el pleno invierno.
La Sala de Conciertos y Conferencias Harpa
Este gran edificio de cristal se encuentra en el antiguo puerto de Reikiavik y cuenta con el prestigioso premio de arquitectura Mies Van der Rohe (2013).
Dependiendo de la hora y el día que lo visites cambia de tonalidad gracias al reflejo del agua y la luz. Es un edificio vivo.
Puedes entrar por libre y pasear por el o apuntarte a sus visitas guiadas.
Si te gusta la arquitectura futurista, es tu imprescindible.
Iglesia de Hallgrimskirkja
Visible desde casi cualquier punto de Reikiavik, la iglesia Hallgrimskirkja se alza imponente en el centgro de la capital.
Es una iglesia en activo por lo que debes prestar atención a los horarios. Esta abierta de lunes a sábado excepto durante los servicios o conciertos que suelen ofrecer.
Y hasta aquí puedo leer, Islandia no decepciona, aunque te hundas en la nieve, aunque no veas auroras y pases por delante de la iglesia negra sin verla. si os tengo que hacer un resumen de este espectacular viaje, os puedo decir con una gran sonrisa: Hay que volver.
